El juego, que persuade principalmente a
menores entre los 12 y 14 años con tendencia a la depresión, consiste en
cumplir con 50 retos que van desde pintar una ballena en una hoja de papel
hasta lanzarse al vacío desde un edificio.
Son cincuenta
retos, durante cincuenta días, que llevarían finalmente al suicidio de los
niños que lo juegan. Esa sería, en pocas palabras, la descripción de la Ballena Azul, un juego digital que se habría
originado en Rusia y que sería
Foto archivo de internet
¿En qué
consiste el juego?
La Ballena Azul comienza en grupos
anónimos creados, por lo general en redes sociales como Facebook, administrados
por personas que operan bajo pseudónimos. El primer paso es contactar a los
jóvenes a través de mensajes a sus cuentas en redes sociales o teléfonos
celulares.
Una
vez se acepta entra en el juego, se empiezan los cincuenta retos que van desde
tareas bastante básicas, como dibujar una ballena en el papel o hacer
publicaciones en redes sociales con el hashtag #I_am_whale (soy una ballena). A
medida que pasa el número de tareas, se incrementa el nivel de
“dificultad” hasta el punto en que los menores son persuadidos para
realizar actos en contra de sí mismos, como a hacerse heridas o a dibujar una
ballena en su antebrazo utilizando una cuchilla.
Foto archivo de internet
Entre los retos que se han conocido están
el de cortarse el labio, pararse en el borde de un puente, sentarse sobre un tejado,
ver videos de horror a una hora determinada o escuchar música que los
administradores, llamados curadores, envíen.
Para
poder continuar con una nueva tarea, los menores deben enviar una fotografía
como prueba de haber cumplido con la tarea asignada. Según los medios de Rusia, la última prueba consiste en lanzarse al vacío desde un edificio.
También se ha señalado que los menores que
intentan abandonar el juego son amenazados por los administradores, quienes los
intimidan señalando que poseen los datos de sus padres o sus direcciones.
Foto suministrada de internet
¿A
quiénes buscan?
El público objetivo que buscan los
administradores del juego se ubica en menores entre los 12 y 14 años que tengan
cierta tendencia a la depresión. De hecho, la tendencia ya llegó a
Latinoamérica y desde Brasil se encendieron las alarmas una vez la Delegación
de Represión de Crímenes Informáticos (DRCI) de Río de Janeiro anunció que se
están rastreando las redes sociales para obtener información sobre el juego.
El juego, que persuade principalmente a
menores entre los 12 y 14 años con tendencia a la depresión, consiste en
cumplir con 50 retos que van desde pintar una ballena en una hoja de papel
hasta lanzarse al vacío desde un edificio.
¿En qué
consiste el juego?
La Ballena Azul comienza en grupos
anónimos creados, por lo general en redes sociales como Facebook, administrados
por personas que operan bajo pseudónimos. El primer paso es contactar a los
jóvenes a través de mensajes a sus cuentas en redes sociales o teléfonos
celulares.
Una
vez se acepta entra en el juego, se empiezan los cincuenta retos que van desde
tareas bastante básicas, como dibujar una ballena en el papel o hacer
publicaciones en redes sociales con el hashtag #I_am_whale (soy una ballena). A
medida que pasa el número de tareas, se incrementa el nivel de
“dificultad” hasta el punto en que los menores son persuadidos para
realizar actos en contra de sí mismos, como a hacerse heridas o a dibujar una
ballena en su antebrazo utilizando una cuchilla.
Entre los retos que se han conocido están
el de cortarse el labio, pararse en el borde de un puente, sentarse sobre un
tejado, ver videos de horror a una hora determinada o escuchar música que los
administradores, llamados curadores, envíen.
Para
poder continuar con una nueva tarea, los menores deben enviar una fotografía
como prueba de haber cumplido con la tarea asignada. Según los medios de Rusia, la última prueba consiste en lanzarse al vacío desde un edificio.
Ballena Azul,redes sociales,juego peligroso,suicidios,50 retos
También se ha señalado que los menores que
intentan abandonar el juego son amenazados por los administradores, quienes los
intimidan señalando que poseen los datos de sus padres o sus direcciones.
¿A
quiénes buscan?
El público objetivo que buscan los
administradores del juego se ubica en menores entre los 12 y 14 años que tengan
cierta tendencia a la depresión. De hecho, la tendencia ya llegó a
Latinoamérica y desde Brasil se encendieron las alarmas una vez la Delegación
de Represión de Crímenes Informáticos (DRCI) de Río de Janeiro anunció que se
están rastreando las redes sociales para obtener información sobre el juego.
En
Colombia, las autoridades sospechan que la muerte de una adolescente y el intento de suicidio por
parte de otras dos en el municipio de San Pedro, Valle del Cauca, está
vinculada a la práctica de este juego
La directora
del Icbf, Cristina Plazas, hizo un llamado a que los "niños menores de 14
años no sean propietarios de celulares inteligentes y que los padres hagan un
control efectivo en casa frente al tema de redes sociales", y señaló que
se continúan lanzando alertas "para que los papás y los colegios
tomen las medidas para proteger a los niños de los peligros del internet".
Cabe resaltar que las autoridades de Ibaguè Tolima , investigan una intoxicación
masiva que fue
reportada al interior del colegio Inem Manuel Murillo Toro de la capital
tolimense, luego de que ocho
niñas ingirieran una extraña sustancia.
Según
el reporte suministrado por las autoridades, una menor de 11 años, en un jugo,
habría mezclado un componente que está siendo analizado para verificar si se
trataría de veneno el cual compartió con sus compañeras
causando afectaciones
en su salud.
Las menores fueron trasladadas y atendidas en el hospital San
Francisco, así lo confirmó el comandante de la Policía Metropolitana Coronel
Jorge Morales.
Las
autoridades se encuentran en alerta en el área metropolitana por el juego
conocido como la ballena azul, donde han recomendado a los
padres de familia controlar
el uso de redes sociales de sus hijos.
Fuente el espectador y caracol.com.co
Fuente el espectador y caracol.com.co